La Reserva de Paracas, en Pisco, es explorada desde el pasado jueves por los integrantes del Proyecto Ukhupacha, formado por espeleólogos y bomberos españoles, que buscan garantizar la seguridad a los turistas tras los daños que registró la zona por el terremoto del 15 de agosto.

Tras el sismo, la reserva fue cerrada al público, pues quedaron destruidas sus más emblemáticas formaciones rocosas, como La Catedral, creada por la erosión del agua y el viento durante 35 millones de años y donde centran sus trabajos los espeleólogos.

"Dentro del contexto del Proyecto Ukhupacha, y siguiendo la vocación que tenemos de colaborar con las instituciones, contactamos con el Instituto Nacional de Cultura (INC), el Instituto de Recursos Naturales de Perú (Inrena) y la UNESCO para ofrecer nuestros apoyos técnicos y humanos", explicó su responsable, Salvador Guinot y añadió que estas instituciones dieron el visto bueno "dadas las dificultades que se plantean para analizar los daños reales en las estructuras rocosas y las cavidades".La tarea de Ukhupacha es realizar "una prospección en Paracas, donde se observan algunos lugares con cierto riesgo, grietas importantes, para determinar si es factible que los turistas puedan acercarse a estos espacios", añadió Guinot.

La ministra peruana de Turismo, Mercedes Aráoz, anunció la creación de diversos circuitos turísticos en Lima, con miras al Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico (APEC), a realizarse el próximo año en la capital peruana.

La funcionaria adelantó que se reunirá con alcaldes de diversos distritos capitalinos con potencial turístico, tales como Pueblo Libre, Barranco, Miraflores, San Isidro y otros, para coordinar estrategias conjuntas y establecer rutas turísticas para los miles de extranjeros que visitarán la conocida como Ciudad de los Reyes.

Aráoz Fernández indicó que incluso ya se reunió con el alcalde de Lima, Luis Castañeda Lossio, para implementar, de cara a 2008, visitas a los diferentes museos y huacas (comunidades religiosas) del Centro Histórico, así como al denominado casco colonial y a los diversos atractivos de la Lima antigua.En ese sentido, comentó que la ciudad debe estar a la altura de las circunstancias, "pues solo con motivo de la cumbre internacional de 2008 arribarían al Perú unos 7.000 visitantes, entre dignatarios, ministros e inversionistas de las 21 economías que conforman el APEC".